autoradmin2 fecha14 Abr 2009 categoriadiálogo comentariosDejá tu comentario

Maffía y Gil Lozano presentan el libro Nosotros, los Santucho

 

 La diputada nacional de la Coalición Cívica, Fernanda Gil Lozano, y la legisladora porteña Diana Maffía presentarán el martes 14 de abril a las 17 hs el libro Nosotros, los Santucho de Blanca Rina Santucho, en el Salón José Luis Cabezas del Congreso.

«Más allá de las opiniones que se tengan sobre las posiciones políticas asumidas por los Santucho, ellos fueron protagonistas de uno de los momentos más trascendentes de nuestra historia y, en este sentido, tenemos que valorar muy sentidamente la tarea que está llevando a cabo Blanquita. Su valor y compromiso ético deben ser un llamado para no dejarla sola», explicó la diputada Gil Lozano, que en septiembre del 2008 presentó un proyecto de ley para declarar el apoyo del Congreso Nacional a Blanca Santucho en la búsqueda de los restos de su hermano, Mario Roberto Santucho.

Mario Roberto Santucho fundó el  Partido Revolucionario de los Trabajadores (PRT) y fue comandante del Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP). El 19 de julio de 1976 fue detenido-desaparecido por fuerzas del Ejército, junto a otros miembros de la dirigencia política del PRT en la localidad de Villa Martelli, durante un enfrentamiento con un grupo de tareas clandestino del Ejército Argentino.

Los familiares de Mario Roberto Santucho, llevan adelante una causa judicial desde hace casi quince años en la búsqueda de los restos de quien fuera el líder del PRT-ERP, sin resultados a la vista.

Blanca Santucho cree por testimonios que logró recoger la causa mencionada, que el cuerpo de su hermano se encontraría preservado en algún lugar de Campo de Mayo.

«Las excavaciones que, a pesar de la resistencia de algunos sectores castrenses, se realizaron en el lugar gracias a la articulación del Poder Judicial y el Equipo de Antropología Forense, resultaron hasta el momento infructuosas. Pero la búsqueda continúa y es necesario el compromiso del Estado Nacional para desobstaculizar las investigaciones y brindar el acceso al predio militar en el que funcionó, además de uno de los centros clandestinos de detención más grandes de la última dictadura, una maternidad clandestina donde dieron a luz cerca de treinta mujeres detenidas-desaparecidas. De esta manera, además, se podrían obtener datos sobre el destino de muchas otras personas que pasaron por dicho establecimiento», agregó Gil Lozano.