Archivo de la sección

opinión

Desigual aplicación de la ley transgrede derechos

Comparto con ustedes la nota publicada en el Periódico Mirador, de México, el pasado 8 de febrero de 2014.

Fallan Estados en garantizar justicia a las mujeres
Por: Anaiz Zamora Márquez

Cimacnoticias | México, DF.

Los Estados en América Latina (AL) incumplen su obligación de garantizar los medios y recursos indispensables para que las mujeres puedan exigir el castigo a sus agresores y la reparación del daño, pues no aseguran en primer lugar que ellas conozcan sus derechos, aseguró la doctora Diana Maffía, directora del Observatorio de Género en la Justicia del Consejo de la Magistratura de la ciudad de Buenos Aires.

Ayer fue inaugurado el Diplomado Internacional “Los desafíos del  feminismo en América Latina” –organizado por el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades (Ceiich) de la UNAM–, con la conferencia “Crítica feminista del Derecho” impartida por la investigadora.

Durante el evento la doctora en Filosofía por la Universidad de Buenos Aires, Argentina, denunció el incumplimiento de los Estados a nivel latinoamericano para garantizar que el ejercicio del Derecho sea igualitario para mujeres y hombres.

Maffía explicó que para que la población femenina pueda acceder a la justicia –principal objetivo del Derecho– es necesario que previamente el Estado les garantice los medios y recursos indispensables para exigir justicia.

Lo anterior comienza con el conocimiento de sus garantías mínimas, ya que actualmente hay mujeres que desconocen que la violencia intrafamiliar es una violación a sus Derechos Humanos (DH), y suelen pensar que es su responsabilidad resolverlo “cuando prevenir cualquier tipo de violencia o agresión contra las mujeres es una obligación de los gobiernos”.

Sostuvo que “percibir una circunstancia como violatoria de derechos es un primer paso importante para acceder a la justicia, difundir y acercar ese conocimiento a la población es responsabilidad de las y los dirigentes de las naciones”.

Además –dijo– se debe garantizar la existencia de un sistema de justicia especializado, objetivo y que defina sus resoluciones a tiempo.

Lo que incluye que aquellas víctimas de violencia de género que no cuenten con los recursos económicos para pagar una defensa propia, puedan ser respaldadas por un abogado de oficio que cuente con la formación y especialización necesarias para litigar desde la perspectiva de género y los DH.

Finalmente Diana Maffía sentenció que hay una falta de voluntad política que “se expresa en la escasez de medios para que las mujeres ejerzan sus derechos, lo que es lamentable pues es en la omisión de los Estados donde las mujeres ven más vulnerados sus derechos”.

Las sesiones del Diplomado Internacional se desarrollarán de febrero a junio de este año en las instalaciones del Ceiich y contará con la participación de especialistas, como la doctora Teresa Ordorika Sacristán, Patricia Castañeda Salgado, así como de la antropóloga Marcela Lagarde y de los Ríos.

 

autorDiana Maffía fecha8 Ene 2014 categoriaactualidad, democracia, jóvenes, opinión comentarios1 comentario

Entrevista, Mundo Académico, UNTREF

Comparto con ustedes la entrevista sobre política latinoamericana realizada en 2013 con Mundo Académico, medio audiovisual de la Universidad Nacional de Tres de Febrero.

[youtube jEFXKAAQMg4]

 

Tejiendo Redes Activistas

En Mar del Plata, durante el 7 y 8 de diciembre de 2013, se llevará a cabo el IV Congreso Nacional de Ateísmo en Argentina, “Tejiendo Redes Activistas, en el que estaré participando. A continuación encontrarán más información, en el archivo adjunto (Editorial IV CNA – PDF) y en el afiche que lo acompaña.
Volante Programa IV CNA

Sobre La historia del primer encuentro

Comparto con ustedes la nota que escribió Luciana Peker sobre La historia del primer Encuentro Nacional de Mujeres.

“Cada año llegan mujeres por primera vez a los Encuentros y dicen no ser las mismas cuando regresan”, escribió Diana Maffía en la introducción al libro Mujeres pariendo historia, cómo se gestó el Primer Encuentro Nacional de Mujeres, reseña íntima y política de las integrantes de la Comisión Promotora, que publicó, en marzo de este año, la Legislatura porteña y fue editado por ella, Aluminé Moreno y Laura Morroni, con fotos de Salvador Batalla. El objetivo fue hurgar en la biografía –desconocida y poco reconocida– de las impulsoras de un fenómeno inédito internacionalmente como son los encuentros de mujeres, que reúnen alrededor de veinte mil participantes de todo el país y todos los sectores sociales y arcos de edades. Y a diferencia de los congresos sobre otras temáticas u otras regiones, de forma autónoma y sin financiación de partidos políticos o instituciones comerciales, sindicales o académicas.

“Ellas, que dedicaron arduas horas de discusión y de trabajo para organizarlo, me invitaron a ese esperanzado conjunto de talleres al que asistimos mil mujeres, que esperaba expandirse y crecer en una complicidad que finalmente fue una utopía realizada”, agradeció Maffía a las cuarenta y cinco impulsoras del inicio de un fenómeno de participación inusual que este fin de semana largo se lleva adelante en San Juan.

El Primer Encuentro de Mujeres se gestó, a poco de recuperada la democracia, entre el 23 y 25 de mayo de 1986 en el Centro Cultural San Martín. Nadie se imaginó que en la continuidad de los años se iba a convertir en una cita ineludible, federal y sumamente masiva y transformadora.

En ese tiempo se luchaba por la patria potestad compartida, cuando todavía los varones tenían en su poder –por sobre las madres– las decisiones legales sobre sus hijos. Y, en ese momento, ni siquiera estaba aprobada la ley de divorcio. De ese reclamo a la actualidad hay mucho camino recorrido. Los cambios sociales son abismales y, en muchos casos, fueron impulsados desde las marchas que cierran los Encuentros de Mujeres. Veintiocho encuentros atrás, los talleres que se realizaron fueron Mujer y salud, Mujer y participación; La mujer y la violencia doméstica, Identidad; Iglesia y mujer, Feminismo; Mujer, educación y realidad; Estereotipos sexuales en la educación; Sexualidad; Familias tradicionales y nuevos modelos de familia; La mujer india; Por la libertad de Hilda Nava de Cuesta (una estudiante que fue detenida por la dictadura y continuaba siendo una presa política); Mujer, deuda externa y solidaridad continental, entre otros. Algunos de los temas que se planteaban en los ochenta continúan vigentes y otros plasman una fotografía de los avances en los derechos de las mujeres que vivió la Argentina.

También llegaron visitantes de Brasil, Cuba, Perú y Chile. Esa mirada global sigue representada en los actuales encuentros, donde se pueden escuchar, por ejemplo, a mujeres de Honduras o Paraguay que vienen a hacer oír sus problemáticas. Luchadoras reconocidas como María Elena Walsh, María Luisa Bemberg, Nilda Garré, Liliana Daunes, Florentina Gómez Miranda, Clori Yelicic y Marta Bianchi también respaldaron este primer esbozo de original forma de organización que sigue dando frutos.

En las biografías que se cuentan en el libro de las pioneras se relata la historia personal y política de una época que cambió la vida de las mujeres. La mayoría de las que gestaron el primer paso tiene ahora entre cincuenta y ochenta años. Algunas ya fallecieron. Pero la mayoría de las entrevistadas tiene una larga historia y una memoria conmovedora. Por ejemplo, de las cenas que hacían después de cada jornada, en donde las mujeres de diversos partidos políticos, instituciones o procedencias compartían un ritual guiso de lentejas.

En las cenas se juntaban desde militantes del PCR hasta del Partido Conservador. El objetivo era avanzar sobre la participación femenina con la reivindicación de un cupo femenino –que se logró– e impulsó, a su vez, la llegada de otras generaciones de dirigentes a lugares de poder.

Una de las muchas representantes de la comisión organizadora del Primer Encuentro de Mujeres, Clara Fontana, define sobre el trayecto recorrido: “Creo que es muchísimo lo que hay que conseguir. Pero lo que es más importante es que sea de fácil acceso lo que ya pudimos conseguir. Lo que conseguimos no tiene vuelta atrás y es de un valor incalculable”.

Publicada el lunes, 25 de noviembre de 2013 en http://www.pagina12.com.ar/diario/elpais/subnotas/1-65830-2013-11-25.html

Está mal que hagan de su ignorancia una barrera discriminatoria

Comparto con ustedes la entrevista realizada por Parte del Show a raíz de los ataques transfóbicos a Florencia de la V.

«¿Qué es una travesti? No es raro que las personas que no han hecho un esfuerzo especial por comprender la identidad sexual, la identidad de género, la orientación sexual y las muchas expresiones contemporáneas de la sexualidad estén un poco confundidas.

Lo que está mal es que hagan de su ignorancia una barrera discriminatoria. Esa barrera muchas veces expresa temor a la diferencia, y no pocas temor a revisar la propia identidad.

Los cambios han sido veloces. En los ´60, la píldora anticonceptiva permitió separar la sexualidad de la reproducción. En los ´80 las tecnologías de reproducción asistida posibilitaron la procreación sin sexualidad.

La adopción homoparental separó la sexualidad de las funciones materna y paterna y el cuidado. El matrimonio igualitario separó la heterosexualidad de la familia y de la paternidad y maternidad. La ley de identidad de género separa los cuerpos sexuados del género asignado.

La reforma del Código Civil -no sabemos si en la versión enviada al Congreso porque no ha sido pública- permitiría separar la maternidad por gametos (quien dona óvulos o esperma), por gestación (quien lleva adelante el embarazo, por ejemplo prestando su útero) y por voluntad procreacional (quien pide esas donaciones para ser padre o madre).

Alarma que ante cambios tan drásticos en las leyes todavía la opinión pública no pueda distinguir una persona homosexual de una con una identidad de género diversa, y peor aún, que no se respeten las libertades y derechos que derivan de esas leyes.

Que eso le pase a una persona pública con enormes privilegios, como Florencia de la V, que tiene un trabajo muy bien pagado y acorde con su talento y su esfuerzo, tiene una pareja amorosa que pudo legitimar en matrimonio y tiene dos hijos, y cuya filiación se le reconoce a ella y su pareja gracias a las nuevas tecnologías en función de su deseo de ser padres, nos puede dar una dimensión de qué pasa en la sociedad con otras travestis que no gozan de esos privilegios.

Travestis, personas que mantienen su genitalidad pero tienen una expresión de género diversa a la que les fue asignada por esa genitalidad.

La activista Lohana Berkins, flamante directora de la oficina de Identidad de Género y Orientación Sexual en el Observatorio de Género en la Justicia del Consejo de la Magistratura de la Ciudad de Buenos Aires, en su libro La Gesta del Nombre Propio, revela con encuestas que casi el 90% de las travestis viven de la prostitución, que raramente pasan la edad de 35 años por lo que su perspectiva de vida es mínima, que han sido expulsadas de la familia y de la escuela desde su adolescencia, que viven hacinadas en lugares poco dignos por falta de aceptación social, que a pesar de la ley pocas veces se les respeta su nombre de identidad y son tratadas como varones.

Ojalá esa persona pública y querida que es Florencia de la V, al inspirar preocupación entre sus seguidores, logre hacernos pensar un poco más allá sobre la falta de ciudadanía de muchas personas como ella, y sobre nuestra responsabilidad en muchas formas de discriminación todavía extendidas en la sociedad. Ojalá que un debate tan importante tenga lugar en muchos foros además de en un programa de comentarios del espectáculo, y si es allí, que sea a la altura de la importancia de un tema de derechos humanos.»

Diana Maffía (directora del Observatorio de Género en la Justicia de la Ciudad de Buenos Aires)

Publicado en: http://www.partedelshow.com.ar/noticia/diana-maffia-esta-mal-que-hagan-de-su-ignorancia-una-barrera-discriminatoria el 14 de noviembre de 2013.