La primera mujer que votó
A CIEN AÑOS DEL PRIMER VOTO FEMENINO
Por una iniciativa de mi autoría, la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires aprobó colocar una placa en la vereda de la Iglesia San Juan, en el barrio de la Boca, situada en Olavaria 486 de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, con el siguiente texto:
“El 23 de noviembre de 1911, Julieta Lanteri, médica y feminista, fue la primera mujer que votó en la Ciudad de Buenos Aires en el atrio de esta iglesia. Más tarde, una ordenanza municipal prohibió votar a las mujeres hasta 1947”.
La doctora Julieta Lanteri nació en 1873 y murió en un dudoso accidente en 1932. Fue una de las mujeres más luminosas del siglo XX. Segunda médica argentina, feminista y luchadora incansable por los derechos de las mujeres y fundadora del Partido Feminista Nacional.
Innumerables fueron los actos públicos que protagonizó, todos ellos tuvieron el efecto de difundir y crear conciencia sobre las injusticias de las que eran objeto las mujeres.
En 1911, la Municipalidad de Buenos Aires convocó a los vecinos para armar los padrones con vistas a las elecciones municipales de concejales a «los ciudadanos mayores, residentes en la ciudad por lo menos desde un año antes, que tuvieran un comercio o industria o ejercieran una profesión liberal y pagasen impuestos comunales por valor de 100 pesos como mínimo.»
La doctora Julieta Lanteri, tomó nota de que nada se decía sobre el sexo, por lo que se inscribió el 16 de julio de 1911 en la Parroquia San Juan Evangelista de La Boca.
El 23 de noviembre de ese año votó en el atrio de la Parroquia y su voto fue firmado por el Dr. Adolfo Saldías, presidente de mesa, quien se alegro «por ser el firmante del documento del primer sufragio de una mujer en el país y en Sudamérica».
Poco tiempo después, el Concejo Deliberante porteño sancionó una Ordenanza donde especificaba claramente que estaba prohibido el voto de las mujeres porque el empadronamiento se basaba en el registro del servicio militar. Julieta Lanteri solicitó ser enrolada y acudió directamente al Ministro de Guerra y Marina adonde fue rechazada.
Se cumplen cien años de aquel voto y de aquella injusticia del Concejo Deliberante. Hoy que las mujeres no sólo votamos sino que formamos parte del cuerpo legislativo, la colocación de una placa en el lugar que votó por primera vez una mujer, es un acto de justicia y un aporte a la memoria colectiva.