Perspectiva de Género en la nueva Constitución de Santa Fe
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Comparto con ustedes la entrevista realizada por el portal Diario Uno de Santa Fe.
Diana Maffía estuvo en Santa Fe y analizó el problema de la violencia, los vagones exclusivos y los roles dentro del hogar.
Se acerca un nuevo 3 de junio y volveremos a salir a las calles exigiendo #NiUnaMenos y #BastaDeFemicidios. Luego de la multitudinaria marcha del año pasado, ya más seguras de la voluntad colectiva que acompaña estos reclamos, nos preparamos organizando, discutiendo y evaluando qué avances logramos y qué demandas pendientes nos quedan para alcanzar una sociedad paritaria y sin violencia de género.
Pero ¿de qué hablamos cuando hablamos de violencia de género, cuando hablamos de femicidios? Los medios de comunicación están más receptivos con el tema y los conceptos, pero a veces se transmiten sentidos equivocados o se hacen visibles situaciones de violencia de una manera regresiva en cuanto a derechos. La mayor presencia en los medios de comunicación asegura la difusión, pero no siempre la corrección de las ideas.
Escuché periodistas respetables hablar de “violencia de género” cuando un hombre es víctima de violencia por parte de una mujer, y eso no es correcto. Porque la violencia de género se define por las relaciones desiguales de poder que subordinan a las mujeres, y las relaciones patriarcales que hacen de las mujeres (y los hijos e hijas) propiedad de los varones y responsables del cuidado y los trabajos domésticos. Cuando una mujer se rebela a ese lugar, la respuesta es la amenaza, la violencia y la muerte. Un varón puede sufrir violencia e incluso ser asesinado, pero esto no ocurre en una cultura que legitima relaciones desiguales de poder, sino todo lo contrario. Es violencia, pero no es violencia de género.
El concepto de “Femicidio” es el tenebroso final de esa escalada de violencia. No se trata de un conflicto privado entre dos personas, ni tampoco de un crimen pasional (como todavía se insiste en caracterizarlo). Aunque ocurra en el seno de una pareja o ex pareja, está basado en una desigualdad sistemática en la que el Estado tiene responsabilidades. Por eso le reclamamos al Estado su intervención, no sólo para penalizar al femicida, sino fundamentalmente para evitar los femicidios.
Hablamos de femicidios porque sabemos que en el largo camino que recorremos las mujeres tropezando con múltiples formas de violencia, muchas de las cuales están tipificadas en la ley correspondiente, instituciones y funcionarios inclumplen por omisión las obligaciones a las que se han comprometido. Porque nos tomamos en serio los derechos humanos y estamos convencidas de ser parte de su universalidad. No banalicemos los conceptos. Esto no es una avanzada de las mujeres sobre los varones, sino sobre el patriarcado como un sistema cruel que también los oprime aunque parece darles privilegios. Es imposible construir igualdad en un sistema que naturaliza sobre las diferencias sexuales la desigualdad política y de derechos.
Y si ya hemos aprendido a usar la palabra “femicidio” avancemos sobre otras formas de crímenes de género subordinados, hablemos de “travesticidios” y de “transfemicidios” con palabras que iluminen sus específicas relaciones de opresión, respetando sus propias voces. Nombremos juntas al poder que asesina, y gritemos alto #NuncaMas.
*Por Diana Maffía, Directora del Observatorio de Género en la Justicia.
Publicado en Página/12. 30 de mayo de 2016
Adhiero, y difundo esta campaña de ADC.
Las organizaciones sociales y personas abajo firmantes celebramos la discusión de una Ley de Acceso a la Información en el Congreso de la Nación. La existencia de consenso sobre la necesidad de aprobar esa norma constituye un hito significativo y valioso.
El acceso a la información es un derecho humano fundamental y un principio básico de la democracia. La existencia de herramientas adecuadas que garanticen este derecho contribuye a incrementar la transparencia gubernamental, facilita el control y mejoramiento colectivo de las políticas públicas, aumenta la rendición de cuentas de los funcionarios, estimula la participación ciudadana, amplía el debate sobre los asuntos públicos, acorta la brecha entre gobierno y ciudadanos y mejora la calidad de las instituciones y de nuestra democracia. A su vez, es un instrumento fundamental para el ejercicio de otros derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales. Es por eso que la sanción de una ley que asegure el acceso de todas las personas a la información pública es una deuda que como sociedad debemos saldar cuanto antes.
Además de establecer la regla de la publicidad de toda información en manos del Estado y del acceso a ella por parte de cualquier individuo que la solicite, la ley debe crear mecanismos eficaces de reclamo ante su incumplimiento. Por esa razón, los estándares internacionales exigen y la experiencia comparada demuestra que es necesario contar con una autoridad independiente e imparcial que controle el efectivo cumplimiento de la ley.
En ese sentido, notamos con preocupación que el dictamen de mayoría emitido el pasado 21 de abril por las comisiones de Asuntos Constitucionales y Presupuesto y Hacienda de la Cámara de Diputados de la Nación no cumple con este requisito fundamental. Si bien el dictamen contiene avances importantes, aún requiere mejoras sobre aspectos trascendentales. En efecto, el texto no prevé garantías suficientes de independencia para la Agencia de Acceso a la Información Pública (AAIP) que la ley crearía, y cuya función sería la de velar por el cumplimiento de la ley y resolver los reclamos que se presenten. El dictamen prevé que tanto la designación (arts. 20 y 21) como la remoción de su titular (art. 27) dependan de la voluntad del Poder Ejecutivo (en el segundo caso con intervención no vinculante de una comisión ad hoc del Congreso), lo cual supone un condicionamiento para el cumplimiento adecuado de sus fines y vulnera el principio de independencia del órgano de control. Un modelo regulatorio de tales características pone en riesgo el cumplimiento efectivo de los fines de la ley.
Por estos motivos, proponemos que se incorpore al mecanismo de designación de su titular la realización de un concurso público de oposición y antecedentes y la consiguiente aprobación del Poder Legislativo. Asimismo –y lo que es más importante aún–, la remoción de ese funcionario no debería quedar sujeta a la sola voluntad del Poder Ejecutivo, sino que también debería contar con la conformidad del Congreso.
En virtud de ello, hacemos un llamado a los Sres. Diputados y Diputadas de la Nación para que nuestra preocupación sea considerada en el debate durante el tratamiento del proyecto en el recinto y que se incorporen las mejoras que sean necesarias para asegurar la independencia del órgano garante de la Ley.
Abuelas de Plaza de Mayo, Amnistía Argentina, Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP), Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), Asociación Cristina de Jóvenes (YMCA), Asociación de Derecho Administrativo de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (ADA), Asociación Pensamiento Penal, Asociación por los Derechos Civiles (ADC), Asociación Síndrome de Down de la República Argentina (ASDRA), Cambio Democrático, Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS), Centro de Estudios Libertad de Expresión y Acceso a la Información (CELE), Centro de Implementación de Políticas Públicas para la Equidad y el Crecimiento (CIPPEC), Confederación de la Sociedad Civil, Consejo Profesional de Ciencias Económicas, Consumidores Libres, Crear Vale la Pena, Datos Concepción, Democracia en Red, Directorio Legislativo, Equipo Latinoamericano de Justicia y Género (ELA), Familiares de Desaparecidos y Detenidos por Razones Políticas, Foro de Periodismo Argentino (FOPEA), Fundación Ambiente y Recursos Naturales (FARN), Fundación Compromiso, Fundación Conocimiento Abierto, Fundación Huésped, Fundación Judaica, Fundación para Estudio e Investigación de la Mujer (FEIM), Fundación SUR, Grupo Artículo 24 por la Educación Inclusiva, HIJOS Regional-Capital, Instituto de Estudios Comparados en Ciencias Penales y Sociales (INECIP), Justicia Legítima, Laboratorio de Políticas Públicas (LPP), Madres de Plaza de Mayo Línea Fundadora, Poder Ciudadano, Red por los Derechos de las Personas con Discapacidad (REDI), Unidos por la Justicia, Wingu, siguen las firmas… (ver listado completo aquí )
Marcelo Alegre, Mirta Baravalle, Martín Becerra, Ingrid Beck, Nora Cortiñas, Florencia Etcheves, Roberto Gargarella, Manuel Garrido, Jorge D. Giacobbe, Andrés Gil Domínguez, Martin Hevia, Diana Maffia, Daniel Malnatti, Silvia Mercado, Ana María Mustapic, Luis Novaresio, Oscar Oszlak, Marta Oyhanarte, Enrique Peruzzoti, Paulino Rodrigues, Daniel Sabsay, Inés Sanguinetti, Catalina Smulovitz, Juan Gabriel Tokatlian, Raúl Zaffaroni, siguen las firmas… (ver listado completo aquí )
Para adherir al comunicado, enviar un correo a accesoalainfoargentina@gmail.com
CONTACTO DE PRENSA
Julieta Laucella Jalif
[ Prensa y Comunicación ]
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comunicacion@adc.org.ar
Cel. 11 6539 2439
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