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enero de 2009

políticas públicas para saldar la brecha de género en el mercado laboral

 Crisis y desigualdad

En la historia de nuestro país y en general en el mundo, las crisis impactan en mayor medida en los grupos más vulnerables ya que aumentan o hacen más visibles las  desigualdades sociales y económicas.  

Cabe aclarar que las estadísticas argentinas sobre mercado de trabajo presentan limitaciones para examinar la situación de equidad de género debido entre otras a estas cuestiones:

  • Cobertura geográfica parcial localizada en grandes centros urbanos.
  • Limitaciones temáticas vinculadas a la escasa preocupación oficial por medir el reparto de tareas de cuidado, uso del tiempo y acceso a servicios de conciliación laboral.
  • Limitaciones para examinar diferenciales en la carrera laboral.
  • Problemas de comparabilidad histórica por cambios en la medición en el año 2003.
  • Falta de desagregación de datos por género y edad.

A estas restricciones se agregó en los últimos dos años la decisión del Poder Ejecutivo de discontinuar la publicación de las bases de datos de la Encuesta Permanente de Hogares restringiendo el acceso a la información.

Desempleo femenino

Históricamente la tasa de desempleo femenina ha sido mayor que la masculina, en el único año en el que se verificó una situación inversa fue en el 2002, esto se explica por dos razones: a) la fuerte caída del empleo formal, sobre todo en el área de construcción, sector con fuerte presencia masculina, b) la implementación del Programa Jefes y Jefas de Hogar Desocupados que tuvo amplia cobertura (2 millones de personas) y en la que las mujeres eran mayoría, la EPH consideró como ocupadas a las personas con PJD. c) la fuerte presencia de mujeres como cuenta propia no calificada y en el empleo público.

Podríamos pensar que la presente crisis, que ya manifiesta índices de retroceso en la construcción y en el comercio, llevaría a una situación similar a la descripta en el párrafo anterior.

  
Crisis e igualdad de oportunidades

Si bien el gobierno suscribió los «Objetivos del Milenio» de Naciones Unidas -que tiene un objetivo específico vinculado a igualdad de oportunidades entre hombres y mujeres e incorporó uno sobre trabajo decente- en los últimos años se observa un incremento de la desigualdad de género debido a :

a) aumento en la brecha de desempleo,

b)  un incremento de la brecha de ingresos,

c) disminución de la tasa de actividad femenina en los hogares más pobres ya sea por ingresos o por región.

Además de las inequidades en el ingreso al mercado de trabajo la desigualdad de oportunidades también se manifiesta en la forma en la cual logran incorporarse hombres y mujeres.

Los cambios ocurridos en los últimos años no han sido uniformes, las mujeres que viven en los hogares más pobres tienen ahora una menor participación en la economía remunerada. En este grupo quienes se incorporan al mercado de trabajo (1 de cada tres mujeres puede hacerlo), más de tres cuarta parte (76.5%) se encuentra en situaciones vulnerables, tales como sin ocupación o con empleos precarios (asalariados no registrados y servicio doméstico). De quienes consiguen ocupación el 65.9% lo hace en estas categorías, porcentaje que se ha incrementado en estos años y que es notoriamente más alto que el que se verifica en el grupo de mujeres de los hogares con mayor nivel de ingreso, entre quienes este tipo de ocupación solo representa el 14% de las ocupadas.

Estos datos han sido reconocidos por el Ministerio de Trabajo: Informe 1 e Informe 2 

Aún existiendo múltiples avances hacia un modelo de crecimiento integrador, con mayor igualdad y cohesión social, todavía existen importantes desafíos para las políticas públicas, dentro de los cuáles, uno de los grandes temas pendientes es la cuestión del género.

Ver cuadro

  
Políticas Públicas de Género

La evolución de los últimos años pone en evidencia la necesidad de aplicar políticas activas para la reducción de la inequidad. Estas políticas deben incorporar en su diseño acciones que contemplen el reparto de responsabilidades de cuidado y medidas de conciliación. La presencia de niños y niñas en el hogar es un factor que condiciona en mayor medida la incorporación de las mujeres en el mercado de trabajo, sobre todo en los hogares más pobres que no pueden comprar servicios de cuidado.

Ver cuadro

  
¿Qué acciones podrían tender a disminuir esta brecha?

a) asignación universal por hijo/a.

b) ampliación de los servicios de cuidado infantil, que favorezcan la cobertura de los sectores más pobres.

c) mejoramiento de la infraestructura básica  (agua, luz, asfalto, etc.) que afecta e incrementa las condiciones en que se realiza el trabajo doméstico.

d) políticas activas que favorezcan la contratación de mujeres en sectores tradicionalmente masculinos.

e) becas que fomenten la incorporación de mujeres en carreras ídem.

f) mejorar el acceso al crédito de emprendimientos de mujeres.

g) fortalecer los sistemas de información para darle visibilidad a la desigualdad de género en el mercado de trabajo por sectores

  
Otras medidas posibles.

a) reparto de responsabilidades en las tareas de cuidado al interior del hogar y también con mayor implicancia del estado en la provisión de servicios.

b) cambios culturales políticos y económicos en la actual división sexual de trabajo. La segmentación del mercado de trabajo que refleja los actuales patrones de división sexual del trabajo condiciona las posibilidades de las mujeres para incorporarse a los sectores más dinámicos de la economía.

Desde 1995 (primer año con datos) las mujeres han representado un 30% de los asalariados formales en el sector privado, esta situación no ha cambiado en más de una década.

Las desigualdades en la carrera por segmentación vertical no solo explican las desigualdades en el ingreso laboral, también repercuten en el acceso a la seguridad social. Las políticas de seguridad social que están asentadas en una base exclusivamente contributiva como es el caso de Argentina limitan las posibilidades de la mujer para acceder a los beneficios previsionales, pues no contemplan las desigualdades de género por diferenciales en el reparto de tareas de cuidado.

Claudia Giacometti
Susana Campari
autoradmin2 fecha7 Ene 2009 categoriaagenda comentarios1 comentario

Sesión extraordinaria

Se tratarán las siguientes designaciones:

-Defensor/a del Pueblo de la Ciudad y Defensores/as Adjuntos/as.

-Presidente y miembros del Directorio del Ente Único Regulador de los Servicios Públicos.

-Técnicos profesionales del Consejo del Plan Urbano Ambiental.

-Miembros del Consejo de los Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes.

autoradmin2 fecha7 Ene 2009 categoriaeducación, todas comentarios2 comentarios

encuentros de discusión y debate sobre la ley de educación en la ciudad autónoma de buenos aires

Durante el transcurso de 2008 se llevaron a cabo encuentros abiertos y participativos con el motivo de iniciar el debate sobre la Ley General de Educación de la Ciudad. Esta iniciativa, impulsada por las diputadas Diana Maffía (Coalición Cívica), Patricia Walsh (Nueva Izquierda) y el diputado Martín Hourest (Igualdad Social), contó con la presencia de especialistas en la materia, legisladores y legisladoras de la ciudad, docentes, estudiantes, organizaciones sociales, gremiales, políticas y ciudadanas y ciudadanos interesados.

Las conclusiones extraídas de estos encuentros son las siguientes:

Primer Encuentro:

14 de julio. «Ley de Educación de la Ciudad. Un debate necesario».

Invitadas: Dra. María Teresa Sirvent y Lic. Susana Elba Vior.

Diagnóstico

Enfrentamos una situación educativa de riesgo: es la población en riesgo de quedar marginada o excluida de la participación en la vida social, política y cultural del país por no haber alcanzado los niveles básicos de educación formal. Esto es pobreza educativa.

De esta población en situación educativa de riesgo, es mínimo el porcentaje que logra insertarse espontáneamente en instancias de una educación más allá de la escuela.

El problema central que atraviesa la educación en nuestro país es el de la pobreza y la desigualdad educativa que en nuestra ciudad llega al 41%, agudizándose considerablemente en los distritos ubicados al sur de la Av. Rivadavia.

Situación general de la educación en la Ciudad de Buenos Aires

En Buenos Aires: diferencias entre las zonas al norte y al sur de la Avenida Rivadavia. Situación se agudiza cuando trabajamos con población proveniente de hogares pobres (medidos por las NBI). Según Censo de 2001, el 70% de las y los jóvenes de 15 a 24 años provenientes de hogares pobres había caído del sistema educativo. Se trata de 16.285 jóvenes.

Según el Censo de 2001, en la CABA, el 85% de la franja de 15 a 19 años está en situación de riesgo educativo.

 Estas y estos jóvenes y adultos quedan fuera del Proceso de Avance Acumulativo en Educación: cuanta más educación formal tenemos, más educación para toda la vida demandamos.

En educación de adultos  existe un desfasaje entre demanda potencial y demanda efectiva. En el 2006, en Buenos Aires, sólo 4% de la población en situación de riesgo está inscripta en educación de adultos.

Escasa participación ciudadana y estudiantil

Grave asignatura pendiente: participación ciudadana real, no ilusoria, que implican la construcción colectiva de las opiniones. Necesidad de convocar a la participación real en la construcción de la ley de educación de la ciudad. Mecanismos incorporados que impiden la participación real: clientelismo, fragmentación, internismo, matonismo, considerados como legítimas formas de hacer política. Condiciones mínimas para lograr la participación real: pensar el tiempo necesario para que los grupos accedan a la información sobre la situación educativa, el sistema, el funcionamiento, los problemas más acuciantes; y trabajar colectivamente en ese conocimiento. Una participación sin conocimiento o sin información favorece la manipulación.

Hoy los y las estudiantes, como adolescentes y jóvenes, no tienen espacios de realización; espacios de creación, en la ciudad de Buenos Aires, que ha sido históricamente la ciudad que se movía por la educación y por cuestiones político-educativas.

Leyes de educación

Continuidad de la transformación educativa de los 90. La reforma educativa fue exitosa en cuanto a los objetivos buscados: hay cada vez menos estudiantes.

Ley de financiamiento educativo, ley tramposa promovida por el Banco Mundial. Establece que si no dedicamos el 6% del PBI a educación no vamos a cerrar nunca la brecha que nos separa de la situación educativa de los países desarrollados. Esta ley incluye también una cláusula referida a la posible revisión del Estatuto del Docente, es decir, la reglamentación laboral de la docencia. 

Nuevas leyes de educación se dieron en el marco de la segunda reforma del estado. El planteo es: ¿qué hacemos con un estado escuálido y cómo mantenemos la gobernabilidad?

La formación de los Consejos de Convivencia en las escuelas no genera un proyecto educativo esencialmente diferente, necesario para que el nivel más golpeado -la enseñanza media- recupere sentido para las y los estudiantes y para las y los docentes.

La educación siempre estuvo manejada por un poder unipersonal, el Ministro o Ministra de Educación. Los Consejos Provinciales de Educación nunca tuvieron peso y fueron vaciados de contenido y atribuciones. 

Gastos educativos en la Ciudad de Buenos Aires

La Ciudad de Buenos Aires realiza un esfuerzo financiero levemente inferior a la media nacional siendo que tiene un PBI por habitante superior a la media. El gasto consolidado nacional en educación es del 26.8%, incluyendo el gasto del ministerio nacional, y la Ciudad invierte 25,8%, uno por ciento menos. La Provincia de Bs. As, en cambio, invierte 34% de sus ingresos en educación o sea 8 puntos más que la Ciudad.

La inversión por alumno o alumna en la CABA es bastante superior a la media, casi $5000 al año  contra alrededor de $3000 en el promedio nacional.  La provincia de Bs. As. no logra llegar a la media invirtiendo sólo 2.716 pesos por alumno o alumna por año.  (Esto datos aporta la DINIESE del Ministerio de Educación y el Ministerio de Economía). Con menos esfuerzo proporcional, gozamos de uno de los gastos per cápita más alto. Ser ciudadana o ciudadano  nacido detrás de la General Paz supone, con un costo de vida similar, disponer de casi la mitad de los recursos en educación por estudiante.

Trabajadoras y trabajadores de la educación

En materia salarial, los salarios docentes de la Ciudad son casi iguales a la media nacional, $1750 de salario bruto para un/a docente de Jornada Simple con 10 años de antigüedad, lo que le adjudica el lugar número 10 en el ranking nacional.

Son muchos los y las docentes que tienen 60, 70 horas semanales -este es el límite legal en la ciudad- y algunos tienen más.

Problemas graves de docentes contratadas y contratados por la CABA que trabajan en programas educativos del gobierno de la ciudad, que forman parte de una planta transitoria y están en condiciones de trabajadores y trabajadoras precarizados.

Al considerar las leyes jubilatorias el promedio del último año y no haber movilidad en las jubilaciones, las y los docentes se ven conminados a juntar la mayor cantidad de horas en sus últimos años de trabajo para acceder a una jubilación digna.

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